viernes, 15 de julio de 2011

Necesidades Básicas

Este post va dedicado a mi querida amiga Hilda Cerda que me hizo recordar que tengo un olvidado blog y mucho por decir.

Todo el mundo sabe de estas necesidad básicas, estas grandes cosas sin las cuales no podríamos vivir; las que responden a antiguos llamados de la naturaleza provenientes de lo más profundo de nuestros propios cuerpos.

En algún momento de nuestra vida se presentan, y nos hacemos conscientes de ellas. Por ejemplo: acabo de nacer, sólo hay tres cosas que puedo (y voy a) hacer: llorar, comer y dormir. Lo primero que hago es soltar el llanto y hacerle saber al mundo que ya llegué y no me van a poder sacar de aquí; después es muy posible que me quede dormido, es decir, he pasado un gran rato tratando de salir de esa prisión de carne y eso me ha costado mucho esfuerzo; y finalmente, comer, al despertar (o tal vez mientras duermo) voy a comenzar a alimentarme de esa señora que me ha dado a luz —cómo si no fuera suficiente que me haya cargado por nueve meses, ahora me voy a alimentar de ella.

Esto nos lleva a determinar dos necesidades básicas: comer y dormir.

Otro ejemplo: adolescencia. No necesito decir nada más, esto nos lleva a.... sexo.

Ya tenemos tres en nuestra lista: comer, dormir y coger; perdón: es decir, tener relaciones sexuales.

Bien chicos y chicas, hemos descubierto la clave de la vida. No se tienen que preocupar por naaaadaaaa más. Comer, dormir y coger. Comer, Dormir y Coger. COMER, DORMIR Y COGER.

Aunque, si me lo permiten, yo agregaría una más, sin la cual, al menos yo personalmente, no podría vivir. Y es: comunicarme.
Volvamos al bebé recién nacido: lo primero que hace es llorar, le dice a esta mierda de mundo que ha llegado y que no se va a regir y conformar con sus reglas.
Ahora al adolescente: sexo significa comunicación, tanto para llegar a él, como a la hora de hacerlo, la despedida posterior al acto sexual y simplemente el hecho mismo en sí. Coger son dos cuerpos comunicándose. (<- Punto)

Yo, en lo personal, sufriría mucho, moriría si no pudiera comunicarme. Esta nueva necesidad que hemos encontrado es la que nos lleva a comer, dormir y coger.
Esta urgencia por hacerme notar y saber, a quejarme y expresarme es lo que lleva al bebé a llorar, hacer gestos, luego a balbucear, y a hablar. Es la que lleva al artista a pintar los cuadros más bizarros, a hacer las canciones más ambiguas, a hacer la película más imposible de digerir. Sin mencionar, a las mujeres que gozan del chisme, a los hombres que disfrutan tanto de comentar sobre el partido que ven en ese mismo momento y gritarle al monitor del televisor como si fuera el director técnico de la selección mexicana y no dejemos a un lado a los hipsters que tanto adoran discutir y criticar... lo que sea que discutan y critiquen los hipsters.

Esta misma ansia es lo que lleva al joven internauta a, tarde o temprano (en mi caso, temprano), crearse una cuenta en Google y hacerse su espacio como éste de filosofía personal, queja incansable, expresión libre y sobre todo sacamiento de emociones.

  • Comer.
  • Dormir.
  • Coger.
  • Comunicar.
No es coincidencia de que todas tengan una 'O' después de su consonante, y que podamos llamarlas con el humilde nombre de CoDoCoCo.


¿Tú satisfaces tus necesidades básicas, tus codococo's?